La hermana, que vive en Nueva York, vio a su hermano, residente de Bat Yam, colapsando ante sus ojos durante la conversación en video. Ella no perdió la paciencia y pidió ayuda a miles de kilómetros de distancia.
Gabi Schneider
16 de mayo de 2019
Un residente de Bat Yam, de 50 años, habló el jueves por la noche con su hermana que vive en Nueva York. Durante la conversación, que se realizó en video a través de teléfonos móviles, el hombre colapsó. Su sorprendida hermana vio el hecho desde miles de kilómetros de distancia, pero ella no perdió la razón. Rápidamente llamó a un vendedor que vive en Israel, quien rápidamente llamó a una ambulancia de MDA al departamento del hermano.
Los equipos de la MDA llegaron a la escena, y con la ayuda de los bomberos que irrumpieron en la puerta, lograron entrar y encontraron que el hombre sufría un ataque cardíaco grave y le dieron tratamiento médico avanzado. Volvió a la plena conciencia y luego fue evacuado al Hospital Wolfsohn de Holon.
La paramédica de Maguén David Adom, Naomí Tzvi, quien se encontraba entre el personal médico que llegó a la escena, dijo: “Recibimos un informe del centro Maguén David Adom sobre un hombre que perdió el conocimiento en su apartamento en Bat Yam. Los bomberos llegaron rápidamente y abrieron la puerta y pudimos entrar al departamento. Al entrar vimos luz en el dormitorio y corrimos al lugar”. Tzvi continuó describiendo lo que había. “En la cama yacía un hombre de unos 50 años semi consciente, mientras su hermana todavía estaba conectada a un dispositivo de video de un celular que se encontraba junto al paciente. Se le realizaron pruebas y el diagnóstico fue que había sufrido un ataque al corazón. Le dimos atención médica avanzada para casos de amenaza de vida mientras actualizamos la unidad de cuidados intensivos cardíacos en el hospital. Unos minutos más tardes la dramática situación se había estabilizado y el hombre estuvo otra vez a plena conciencia. Así que lo evacuamos en un coche patrulla de la unidad de cuidados intensivos directamente el hospital Wolfsohn, con los médicos en la unidad preparados para aceptar al paciente”
Tzvi llegó a la conclusión que, a pesar de los muchos años que trabajó como paramédica, no recordaba un caso tan único.
Fuente: Hibadroot