25 de junio de 2019
(JPost) En
un golpe casi sin precedentes para el Abogado General de las FDI, General de
División Sharon Afek, el martes retiró la acusación contra el palestino Mahmoud
Katusa por la violación de un niño de siete años.
La acusación se presentó la semana pasada y dio lugar a llamadas de políticos
de derecha por la pena de muerte para Katusa y por demoler su hogar familiar,
diciendo que el caso fue considerado como una violación terrorista. Pero desde
el principio hubo indicios de que el caso presentaba agujeros oo
inconsistencias inusuales.
Hablando con fuentes oficiales actuales y anteriores familiarizadas con los
problemas legales en juego, se observó que ni la hora, la fecha ni el lugar de
la violación estaban claros en la acusación.
También quedó claro desde el principio que la familia y la comunidad haredí
del niño habían retrasado y obstruido la investigación en formas clave que
podrían haber evitado la recolección de piezas de evidencia clave.
Inusualmente, los miembros de la comunidad haredí del niño también se han
presentado a los medios de comunicación expresando dudas de que Katusa fue el
culpable.
Surgió todo un debate sobre si la policía debió haber examinado la ropa
interior del niño para detectar ADN, aunque el tema de fondo era que la familia
esperó tanto tiempo para denunciar la presunta violación, que era poco probable
que hubiera pruebas de ADN que pudieran haber sido utilizables.
Debido a que el niño tenía siete años, su testimonio fue tomado por un
trabajador social y no por la policía. Si este fue un punto débil para el
caso también se debatió acaloradamente.
Una declaración detallada de Afek no aclaró ninguno de estos problemas y solo
indicó vagamente que había otras pruebas que apuntaban a Katusa más allá del
testimonio del niño, pero que no se podía revelar ahora porque la investigación
de la violación estaba en curso.
Esencialmente, las FDI ahora están diciendo que todavía creen que se produjo la
violación y que Katusa pudo haber tenido un papel, pero que la evidencia
adicional que ha aparecido ha desdibujado tanto la imagen que ya no está
dispuesta a mantener la acusación actual como está.
La declaración no dejó claro si la IDF podría presentar una nueva acusación más
tarde contra Katusa por un conjunto diferente de cargos.
Afek es muy elogiado en el IDF y el establecimiento legal, y esta acusación
retirada tan pronto después de su presentación puede ser una mancha rara en su
expediente.
Al parecer, las FDI continuaron con la acusación cuando creían que su opción era
liberar a Katusa de la custodia en espera de una investigación adicional, ya
que hay límites de tiempo para detener incluso a un sospechoso palestino si aún
no han sido acusados.