Foto: Jóvenes ultraortodoxos en el centro de absorción de las FDI en Tel HaShomer, 9 de mayo de 2024.
Según un informe de la Knesset basado en datos proporcionados por la Dirección de Personal de las FDI, más de las tres cuartas partes de los 4.000 haredim que se presentaron listos para alistarse desde el 7 de octubre de 2023, fueron rechazados.
Es muy poco probable que la Dirección de Personal de las FDI hubiera revelado estas cifras libremente, pero el parlamentario Eli Dallal (Likud) los obligó a ofrecer las cifras reales. A raíz de la solicitud del parlamentario Dallal, el Centro de Investigación e Información de la Knesset emitió un informe el 4 de abril, titulado “ Conscripción de jóvenes de 18 años y tasas de conscripción por grupos de población ”, con las palabras clave “Beduinos, drusos, haredim y árabes israelíes”.
La sección 3.3 del informe, “El número de haredim que se alistaron después del 7 de octubre de 2023”, establece:
Según la Dirección de Personal de las FDI, de los 4.000 solicitantes ultraortodoxos desde el 7 de octubre de 2023, el ejército rechazó no menos de 3.120 por una amplia variedad de razones, la principal de las cuales fue la “incapacidad médica”. Incluso de los 880 que fueron considerados elegibles, sólo 540 fueron reclutados.
El informe continúa: “Mientras tanto, a unos 66.000 jóvenes haredíes se les concedió un aplazamiento de servicio debido a la estipulación ‘su estudio de la Torá es su vocación’”.
Estas cifras son sorprendentes, si no completamente alarmantes, especialmente porque las FDI han declarado públicamente que la continuación de la guerra ha creado la necesidad de 7.000 soldados y comandantes adicionales, junto con la necesidad de personal adicional en una amplia variedad de posiciones. Incluso suponiendo que las tres cuartas partes de los jóvenes haredíes no fueran aptos para el combate, aún podrían integrarse en una variedad de otras funciones en el ejército que no requieren un perfil físico de nivel de combate.
El informe recuerda un estudio publicado en abril de este año por el Instituto de Democracia de Israel, que muestra que una cuarta parte de los aproximadamente 70.000 jóvenes haredíes quieren alistarse en las FDI cuando en la práctica sólo el 10% de ellos lo hace. Parece que mientras las FDI están invirtiendo grandes recursos para atraer a otros segmentos de la población israelí a alistarse, los haredim –que son muy útiles en los ataques de los políticos seculares sobre “compartir la carga”– no son deseados por los militares.
Hasta ahora, incluso cuando el proceso político, impulsado por la Corte Suprema, parece estar produciendo una legislación de reclutamiento ultraortodoxo que los miembros de la coalición ultraortodoxa aprobarían, el gobierno israelí aún debe proporcionar los recursos financieros necesarios para satisfacer las necesidades de miles de soldados ultraortodoxos. .
Y por eso, de momento, es más barato enviarlos a casa.
(Jewish Press)
