Staff de La Página Judía
17 de julio de 2019
En una reunión con la prensa comunitaria, el presidente de la OSM Abraham Duvdevani, anunció la realización los días 22, 23 y 24 de julio del Encuentro Internacional de Educadores Judíos.
En la oportunidad, trazó un crudo diagnóstico de la educación judía en argentina. Al respecto señaló tres factores que a su juicio inciden directamente en esta situación.
Por una parte, las recurrentes crisis económicas que afectan al país, con las dificultades que consecuentemente tienen las escuelas para afrontar sus erogaciones, así como los padres para pagar en tiempo y forma sus cuotas y aranceles.
En segundo lugar, hizo hincapié en la ausencia de educadores. Aquellos que por una cuestión etaria dejan de ejercer su función no tienen personal suficiente ni idóneo que los reemplacen.
Finalmente, se refirió a la exigencia de los padres respecto al contenido de la currícula escolar, donde buscan privilegiar algunas disciplinas específicas en desmedro de las materias de contenido judaico.
Como ejemplo ilustrativo de sus palabras, dijo que el nivel de hebreo de los que terminan la escolaridad a los doce años es inferior al nivel de sus propios padres que han terminado sus estudios años atrás en la misma escuela.
En tal sentido reafirmó que el gobierno de Israel ha asumido como propia la problemática de los judíos diaspóricos, más precisamente en este caso intentar salir de esta degradación constante que se ha producido en la educación judía a través de los años.
En este sentido, continuó Duvdevani, los números le dieron la razón. Sobre una expectativa inicial de 500 a 700 inscriptos, han tenido que cerrar el cupo de admisión en 1250, quedando unos 150 fuera de la posibilidad de participar. No obstante, como su filosofía es colocar a todos en un plano de unión e igualdad, y como prueba del interés de Israel en la cuestión, han previsto que los shlijim que han venido a impartir la instrucción a los docentes y educadores, puedan quedarse dos o tres días más a fin de asistir a aquellos que quedaron afuera.
Si bien en un primer momento se había dispuesto que los shlijim vinieran directamente a participar del proceso de enseñanza, atento al costo que ello acarreaba y que no podía ser soportado localmente, decidieron en su lugar capacitar a los que ya están aquí para elevar su nivel y mejorar la calidad educativa. O sea, enfocarse en perfeccionar los recursos humanos existentes.
El encuentro internacional no sólo abarcará a aquellos que imparten educación en materias judaicas sino a todo el cuerpo docente de las escuelas, como prueba que todos están involucrados en la misma empresa, que es la educación de nuestros hijos.
En otro tramo de la charla, remarcó el fuerte crecimiento del antisemitismo -incluso en Estados Unidos, donde hay más ataques a judíos que en Argentina-, frente al cual hay que mantenerse firme. Y, sobre todo, ante un nuevo aniversario del Atentado a la AMIA, hay que recordar. Recordar es un mandato, tanto para los gentiles, que sepan que no bajaremos los brazos, como para los propios judíos. Así es como recordamos en nuestros rezos cada día la salida de Egipto, o al malvado Amalek. Recordar y sentirnos orgullosos de ser judíos.
