Yasser Okbi
23 de julio de 2019
(JPost. Maariv. Foto: Un miembro de Hezbollah lleva su arma encima de un edificio el 25 de mayo de 2016. Crédito de foto: Hassan Abdallah / Reuters)
Un alto funcionario de Hezbolá y un partidario del régimen de Bashar Assad en Siria, Mashur Zidan, fue asesinado el domingo en una explosión de un automóvil en las afueras del puente al-Kaliya en el suroeste de los suburbios de Damasco, según fuentes sirias.
Zidan se encontraba entre las personas cercanas a Samir Kuntar, quien fue asesinado por Israel y la culpa según Siria es del Mossad, quien dicen que fue el responsable del asesinato de Zidan.
Zidan
viajaba con otra persona cuando un avión israelí le disparó un misil, según un
sitio web de la oposición siria.
Hezbolá comenzó a desplegar fuerzas en el Líbano y Siria cerca de la frontera
israelí, según los informes del sábado.
The Daily Beast publicó una entrevista con varios comandantes de la
organización terrorista que afirmaron que la organización fue perjudicada
directamente por las sanciones financieras que Estados Unidos impuso a Irán y
que, por lo tanto, pretende emprender acciones hostiles contra Israel si Irán
decide que es hora de hacerlo.
Uno de los comandantes señaló que existe la posibilidad de que estalle una
guerra entre Hezbolá e Israel, del tipo “que no sería como sus antecesoras”,
y que “esta vez, seremos los primeros en disparar”.
El comandante enfatizó que las sanciones tienen un efecto negativo en la
economía iraní de una manera que afecta su apoyo a la organización
terrorista. “Si un misil golpea a Irán, será tratado como si Israel
lo hubiera disparado”, amenazó. El comandante también dijo que
“incluso antes de la guerra civil en Siria, queríamos abrir un frente
contra Israel en los Altos del Golán, pero el gobierno sirio trazó una línea
roja. Ahora no hay más líneas rojas”.