Foto: Un bombero entra a un apartamento dañado después de que un misil interceptado impactara en un edificio residencial el jueves. (Reuters/Tomás Pedro)
Las fuerzas rusas en Ucrania están bombardeando ciudades y matando a civiles, pero ya no avanzan sobre el terreno, dijeron el jueves países occidentales, ya que una guerra que se pensaba que Moscú esperaba ganar en cuestión de días entró en su cuarta semana.
Ucrania dijo que las fuerzas rusas habían destruido un salón donde mujeres y niños se habían refugiado en el asediado puerto sureño de Mariupol. Un funcionario de la oficina del alcalde de Mariupol dijo que un refugio antiaéreo en el salón había “resistido” y que había sobrevivientes, pero aún se desconocen los detalles de las víctimas.
Rusia negó haber atacado el teatro, que imágenes satelitales comerciales mostraron que tenía la palabra “niños” marcada en el suelo antes de que explotara.
Viacheslav Chaus, gobernador de Chernihiv, una ciudad del norte que ha sido intensamente bombardeada, dijo que 53 civiles habían muerto allí en las últimas 24 horas. El informe no pudo ser verificado de forma independiente.
Aunque ambas partes señalaron un progreso limitado en las conversaciones de paz esta semana, el presidente Vladimir Putin, quien ordenó la invasión de Rusia el 24 de febrero, mostró pocas señales de ceder.
En un discurso televisado vituperante, arremetió contra los “traidores y la escoria” en casa que ayudaron a Occidente, y dijo que el pueblo ruso los escupirá como mosquitos.
Kiev y sus aliados occidentales creen que Rusia lanzó la guerra no provocada para subyugar a un vecino que Putin llama un estado artificial tallado en Rusia. Moscú dice que está llevando a cabo una “operación especial” para desarmarlo y “desnazificarlo”.
Las fuerzas ucranianas, muy superadas en número, han impedido que Moscú capture alguna de las ciudades más grandes de Ucrania hasta el momento, a pesar del mayor asalto a un estado europeo desde la Segunda Guerra Mundial. Más de 3 millones de ucranianos han huido y miles de civiles y combatientes han muerto.
Rusia ha atacado Ucrania desde cuatro direcciones, enviando dos columnas masivas hacia Kiev desde el noroeste y el noreste, avanzando desde el este cerca de la segunda ciudad más grande, Kharkiv, y extendiéndose desde el sur cerca de Crimea.
Pero la inteligencia militar británica dijo en una actualización el jueves que la invasión se había “paralizado en gran medida en todos los frentes” y que las fuerzas rusas estaban sufriendo grandes pérdidas a causa de una resistencia ucraniana firme y bien coordinada.
Los suburbios del noreste y noroeste de Kiev han quedado reducidos a escombros por los intensos combates, pero la propia capital se ha mantenido firme, bajo un toque de queda y sujeta a letales ataques nocturnos con cohetes.
Al menos una persona murió y tres resultaron heridas cuando un edificio residencial fue alcanzado por un misil ruso derribado, dijeron el jueves los servicios de emergencia.
En medio de la lucha implacable, ambas partes han hablado de avances en las onversaciones. Funcionarios ucranianos han dicho que creen que Rusia se está quedando sin tropas para seguir luchando y que pronto podría aceptar su fracaso en derrocar al gobierno ucraniano. Moscú ha dicho que está cerca de acordar una fórmula que mantendría a Ucrania neutral, una de sus demandas.
Moscú dijo que las conversaciones de paz se reanudaron el jueves por enlace de video por cuarto día consecutivo, discutiendo temas militares, políticos y humanitarios.
(Reuters)
