Foto: El presidente Vladimir Putin en el museo Yad Vashem en Jerusalén, el 23 de enero de 2020.
Rusia puede estar enojada con Israel y, ciertamente, trabajar contra el Estado judío en el ámbito internacional, pero el presidente Vladimir Putin dice que todavía está personalmente comprometido con la lucha contra el antisemitismo y la conmemoración del Holocausto.
El líder ruso hizo la declaración el martes durante una llamada con el presidente de Israel, Isaac Herzog.
Los dos líderes discutieron las relaciones bilaterales entre Israel y Rusia, incluidos los desafíos del pueblo judío en la diáspora. Herzog aprovechó la oportunidad durante la llamada para dar más detalles sobre el tema de las actividades de la Agencia Judía en Rusia, dijo su oficina.
“La llamada telefónica fue franca y honesta. Los dos presidentes enfatizaron las áreas importantes de cooperación entre Israel y Rusia y acordaron permanecer en contacto”, dijo la oficina de Herzog.
“El presidente Putin subrayó su compromiso personal con la conmemoración del Holocausto y la lucha contra el antisemitismo”.
La llamada telefónica fue iniciada por el presidente Herzog a pedido del primer ministro Yair Lapid y en coordinación con el Ministerio de Relaciones Exteriores.
El pasado fin de semana, la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Maria Zakharova, criticó la Operación Amanecer de Israel contra la organización terrorista Jihad Islámica Palestina, que se preparaba para llevar a cabo un ataque serio contra los israelíes que viven cerca de la frontera con Gaza.
Zakharova escribió en una declaración obviamente de doble rasero en el sitio web del ministerio que “Moscú está seriamente preocupada por una nueva ronda de violencia armada en la zona del conflicto israelí-palestino”.
“Otra escalada fue provocada por los ataques aéreos israelíes en la Franja de Gaza el 5 de agosto, en respuesta a los cuales los grupos palestinos lanzaron un bombardeo indiscriminado masivo del territorio israelí”, se quejó.
(Jewish Press)
