Sivan Rahav Meir
“¿Por qué me gusta el Rebe de Lubavitch?”. Este es el título de un breve artículo publicado por Nir Menousi.
El Rebe murió en una fecha como hoy, el día 3 de Tamuz, hace 29 años. Estas son algunas de las respuestas de Nir, que nos dan orientaciones prácticas:
1. Renacimiento después del Holocausto: El líder más aplastante del siglo pasado fue Hitler. Y luego, en contraste, llegó el Rebe. Hitler quería llegar a todos los judíos, incluso a los más alejados del judaísmo, para matarlos. El Rebe proclamó una revolución de renacimiento. Quería llegar a todo judío, incluso al más alejado del judaísmo, para revivirlo.
2. Nunca se tomó un solo día libre en su vida, dirigió y administró instituciones en todo el mundo, respondió a miles de cartas y solicitudes, pero lo hizo siempre con una sonrisa y con tranquilidad, sin ninguna señal de fatiga. El Rebe llamó a esto “rapidez con moderación” – trabajo enérgico y rápido, pero imbuido de paz interior. Ojalá nosotros alcancemos lo mismo en nuestra vida.
3. Todos somos emisarios. Inició la famosa organización de emisarios de Jabad, pero recordó que ellos no son los únicos emisarios. Todo el mundo es un emisario. Si tu conoces sólo la letra A, enséñasela a alguien que ni siquiera conoce la letra A. Tienes algo que dar, el mundo te espera a ti y a tu misión.
4. Afirmó que la elevación del estatus de la mujer es un movimiento espiritual cósmico. Que las mujeres deben aprender y enseñar, y que una mujer no es la esposa del emisario, sino que ella es una emisaria por derecho propio. Pero él recordó que el verdadero estatus de una mujer también está relacionado con el mérito sagrado de concebir, dar a luz y educar a los hijos.
5. En nuestra generación todos están buscando la auto-realización. El Rebe alentó a las personas a dejar de lado su ego, y precisamente de esta manera verdaderamente descubrirse a sí mismos. Si pones a la otra persona en el centro y no a ti mismo, te ocuparás más de lo que tienes para dar y aportar. Así es como realmente te realizas a ti mismo, y el mundo entero se llena de bendición por tu mérito.
En su memoria.
