El ministro de Finanzas, Betzalel Smotich, hizo el miércoles por la mañana comentarios amenazando con derrocar al gobierno por la reanudación de la ayuda humanitaria sin supervisión a Gaza y la falta de progreso en la guerra en Gaza.
Los comentarios de Smotrich se produjeron en respuesta a informes del miércoles por la mañana que revelaban comentarios airados dirigidos al Jefe del Estado Mayor de las FDI, Eyal Zamir, durante una reunión del gabinete de seguridad el martes por la noche. Durante la reunión, el ministro de Defensa, Yisrael Katz, afirmó que Israel se verá obligado a reanudar la entrada de ayuda humanitaria a Gaza en un plazo de dos semanas. Sin embargo, añadió que, a diferencia de lo ocurrido en el pasado, la ayuda no llegará a Hamás, ya que será distribuida por soldados de las FDI o empresas estadounidenses.
Zamir respondió diciendo que “los soldados de las FDI no distribuirán ayuda humanitaria y no dejaremos morir de hambre a Gaza”.
Smotrich se puso furioso con Zamir y le dijo que él era responsable de llevar a cabo las decisiones de la cúpula política y que, si no lo hacía, traerían a otra persona para hacerlo.
Smotrich respondió a los informes el miércoles por la mañana, aclarando que su enojo estaba realmente dirigido al primer ministro Binyamin Netanyahu y no a Zamir.
“Gestionar las acciones civiles en Gaza de forma que no caigan en manos de Hamás fue y sigue siendo el componente más crucial para derrotar a Hamás y ganar la guerra”, declaró Smotrich. “Esto es una parte vital del esfuerzo bélico y es mucho más importante que otra división de las FDI y más acciones militares. Si no lo internalizamos y actuamos en consecuencia, no podremos ganar”.
Smotrich agregó que ha estado “gritando esto durante un año y medio” y, a pedido suyo, las FDI recibieron una directiva explícita sobre su responsabilidad de supervisar la ayuda humanitaria en Gaza antes de que se firmara el más reciente acuerdo de rehenes.
“No tengo ninguna queja contra el Jefe del Estado Mayor de las FDI”, aclaró. “Mi crítica es al primer ministro, quien no garantiza la implementación de las políticas de la cúpula política en las FDI. La entrada de ayuda logística a Hamás es una medida de la que no participaré. ¡Punto!”, amenazó.
“La responsabilidad última de esto recae en el Primer Ministro Netanyahu”, afirmó.
Lanzar una campaña para derrotar a Hamás, conquistar Gaza y establecer un gobierno militar temporal hasta que se encuentre otra solución. Devolver a los rehenes y poner en marcha el plan Trump, o este gobierno no tiene derecho a existir.
Durante la reunión del gabinete del martes por la noche, Smotrich le dijo a Zamir: “Las Fuerzas de Defensa de Israel no eligen sus misiones, y quien no sepa cómo manejarlas puede irse a casa”.
Les hemos informado que deben prepararse para esta distribución de ayuda. Nosotros determinaremos el objetivo y ustedes decidirán cómo llevarlo a cabo. Si no son capaces, encontraremos a alguien más que sí lo sea.
Los ministros presentes en la discusión pidieron a Smotrich que bajara el tono y no gritara.
Smotrich continuó, diciéndole a Zamir: “Decidimos que ninguna ayuda llegará a Hamás. No me importa cómo se logre. Si no saben cómo lograrlo, díganselo a la cúpula política. En una democracia, el ejército no elige sus misiones. No pueden quedarse aquí y decirnos: ‘No lo haré’. Solo la cúpula política decide cuál es la misión”.
Smotrich también criticó a Zamir por la falta de progreso en la guerra en Gaza.
Además, Smotrich cumplió su promesa de boicotear al jefe del Shin Bet, Ronen Bar, abandonando la sala cuando fue el turno de Bar de hablar.
