30 de marzo de 2020
La primera víctima judía del coronavirus en Argentina fue incinerada por las autoridades gubernamentales a pesar de las protestas de la comunidad judía cerca de Buenos Aires.
Rubén Bercovich, de 59 años, propietario de la empresa de materiales de construcción BercoMat y activo en la comunidad judía de Chaco, falleció el jueves en Resistencia, la capital de la provincia norteña de Chaco, luego de regresar de un viaje a los Estados Unidos el 9 de marzo.
Después de la muerte de Bercovich, los funcionarios del gobierno insistieron en incinerarlo, alegando que era la mejor manera de evitar la propagación del virus.
Los rabanim argentinos han iniciado conversaciones con funcionarios del gobierno para llegar a un compromiso con respecto a una exención para las víctimas judías a fin de permitirles cumplir con la ley religiosa. Rabanim en Inglaterra, trabajando en cooperación con líderes religiosos musulmanes, tuvieron éxito en obtener una exención religiosa con respecto a una ley similar en Inglaterra.