Sivan Rahav Meir

22 de octubre de 2020

¿Cómo es posible educar en una situación de crisis mundial? En un día como hoy, hacen 77 años fue asesinado en el Holocausto el Rav Kalonimus Shapira, el Admur de Piaseczna.

El no dejó descendencia. pero sí una gloriosa herencia educativa. He aquí algunos ejemplos:

– El hombre es su propio educador, es el principal responsable de su condición: “No es suficiente con enseñar al joven que su única obligación es la de escuchar a su educador y nada más. Lo esencial es hacer entrar en su corazón el conocimiento de que él mismo es su principal educador… Hay una norma en el ser humano: Cuando él tiene en quien confiar, se descuida de sí mismo y confía en otros.”

– ¿Cómo educarse a sí mismo? ¿Es suficiente con desearlo? Definitivamente no es así, no es un deseo verdadero si no hacemos realmente algo: “Solamente el deseo por el cual el hombre quiere y trabaja para alcanzar algo es llamado deseo. Si el hombre no trabaja, inclusive si él deseara algo, es como si no quisiera nada -esto no se llama desear de verdad, es simplemente un tipo de bendición que el hombre se da a si mismo esperando que ocurra-.

De allí que, el desear que no es real, siempre tiende a ser muy grande. Algo que no pasa con el verdadero desear, que implica trabajar por algo.”

• ¿Cuál es el rol de los padres y maestros? Recordarles a los alumnos sus propias virtudes: Es necesario que el maestro y el padre busquen una virtud que se encuentra en el alumno y alabarlo por ella y fortalecerlo. Un ejemplo es el de aquella persona que alabamos por su generosidad, la cual se fortalecerá con la alabanza y dará más de lo que estaba acostumbrada a dar. Ya que en esto de que la alabamos le damos a su alma las fuerzas para sobreponerse a la cualidad negativa de avaricia que pueda tener.

Que tengamos el mérito de auto-educarnos, de darle fuerza al deseo que se expresa a través de la acción y de enfocarnos en nuestras fortalezas.

En su memoria.