El martes por la noche, Irán lanzó 181 misiles hacia Israel, según informó el ejército israelí, mientras las sirenas de aviso de los misiles sonaban en todo el país y los ciudadanos corrían a refugiarse en los refugios antiaéreos. El ataque provocó una acción inmediata por parte de las autoridades israelíes, y el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, movilizó 13.000 escuadrones de emergencia para un rápido despliegue en todo el país.
Eli Bin, director general de Maguén David Adom, confirmó que un ataque directo a un edificio en el norte de Tel Aviv, concretamente en la calle George Wise, provocó tres heridos por caídas. Se informó de otros ataques en Tel Sheva y otros lugares, como Dimona, Nabatim, Hora, Hod Hasharon, Beer Sheva y Rishon Lezion. Según Magen David Adom, hasta el momento han recibido informes de sólo dos heridos israelíes, una cifra increíble.
Están surgiendo informes de que un residente de Gaza que se infiltró ilegalmente en Israel murió cuando uno de los misiles, o posiblemente metralla de un interceptor, cayó en Jericó, convirtiendo a un palestino en la única víctima reportada del masivo ataque aéreo.
Las imágenes de vídeo de KAN muestran fragmentos de misiles e interceptores cayendo en Yam Hamelach. En respuesta a los ataques, el aeropuerto Ben Gurión detuvo todos los aterrizajes y despegues, al tiempo que se suspendieron los servicios de trenes. Tanto Jordania como Irak cerraron su espacio aéreo en medio de la crisis.
La Guardia Revolucionaria de Irán declaró que el ataque con cohetes era una represalia por el reciente asesinato del líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, amenazando con graves consecuencias si Israel responde.
Este incidente marca una escalada significativa respecto del último ataque de Irán a Israel en abril, que involucró 120 misiles balísticos, 170 drones y varios misiles de crucero.
Los recientes intercambios militares se producen poco después de la intensificación de las operaciones israelíes contra Hezbolá en el Líbano, incluido el asesinato del líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, y sus comandantes más importantes, así como la explosión de buscapersonas y walkie-talkies que mataron y mutilaron a miles de terroristas.
En una acción sin precedentes, el Frente Nacional de las Fuerzas de Defensa de Israel había instado previamente a la región de Tel Aviv a dirigirse a los refugios antiaéreos antes de que sonaran las sirenas de los cohetes.
“Durante la defensa, hemos interceptado algunas naves. Hay algunos impactos en el centro y en zonas del sur del país”, dijo el portavoz de las FDI, Daniel Hagari. “Nos han atacado seriamente y habrá consecuencias graves”.
Mientras tanto, el espacio aéreo israelí ha reabierto, y está previsto que los vuelos se reanuden pronto, y el Comando del Frente Interno de las Fuerzas de Defensa de Israel ha permitido a todos los israelíes abandonar sus refugios.