Foto: El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, habla en la Oficina Oval de la Casa Blanca en Washington, D.C., el 11 de febrero de 2025. Foto: Reuters/Kevin Lamarque.
Una nueva encuesta de Siena Research revela que la mayoría de los votantes judíos de Nueva York aprueban el desempeño laboral del presidente Donald Trump y su manejo de la guerra entre Israel e Irán.
La encuesta encontró que la mayoría de los encuestados judíos, el 57 por ciento, aprueba el trabajo que Trump está haciendo en su segundo mandato como presidente, en comparación con el 42 por ciento que lo desaprueba.
Aún más sorprendente es que el 64 por ciento de los votantes judíos dicen que aprueban el manejo de Trump del conflicto entre Israel e Irán, lo que indica una fuerte alineación con su postura sobre política exterior en una comunidad que históricamente se ha inclinado hacia los demócratas en las elecciones nacionales.
Los resultados de la encuesta ponen de relieve un cambio político notable en uno de los distritos electorales más progresistas del país. En 2020, Trump obtuvo solo alrededor del 30 % del voto judío a nivel nacional, y se observaron tendencias similares en Nueva York. Sin embargo, desde su regreso al cargo en las elecciones de 2024, una victoria que sorprendió a muchos observadores, Trump ha enfatizado una postura agresiva a favor de Israel, que incluye un aumento de la ayuda militar y un apoyo retórico inquebrantable durante la guerra de Israel con Irán y Hezbolá.
La guerra entre Israel e Irán, que estalló a principios de este año tras la escalada de ataques entre ambos países, y la creciente implicación de Teherán con fuerzas subsidiarias en Líbano y Siria, se ha convertido en un punto clave de tensión en la política internacional y un tema central para los judíos estadounidenses. Trump ha prometido repetidamente respaldar a Israel “sin vacilación”, y su administración ha tomado medidas para proporcionar reabastecimiento militar, ampliar el intercambio de inteligencia y bloquear resoluciones de la ONU críticas a las operaciones israelíes.
En respuesta, sus índices de aprobación entre los votantes judíos, particularmente los segmentos ortodoxos y pro israelíes, parecen haber aumentado drásticamente.
“Esto marca una diferencia significativa con respecto a los patrones de votación anteriores”, afirmó Lauren Saperstein, politóloga de la Universidad de Nueva York especializada en el comportamiento electoral de los judíos estadounidenses. “Trump ha aprovechado con éxito las preocupaciones sobre seguridad, especialmente ante la amenaza iraní, y eso está resonando entre los votantes que podrían haber discrepado con él en otros temas en el pasado”.
Datos anteriores sugieren que los votantes judíos ortodoxos tienden a favorecer con mayor intensidad a los candidatos republicanos, mientras que los judíos reformistas y laicos se inclinan por los demócratas. La nueva cifra de aprobación del 57 % indica un apoyo más amplio que el que Trump ha recibido anteriormente del electorado judío de Nueva York.
Los demócratas, por su parte, han tenido dificultades para mantener una postura cohesionada sobre el conflicto entre Israel e Irán. Muchos demócratas criticaron a Trump por su decisión de atacar las instalaciones nucleares de Teherán, argumentando que el presidente se arriesgaba innecesariamente a provocar una guerra regional más amplia. Dentro del Partido Demócrata, las divisiones sobre la política hacia Israel se han profundizado, y los progresistas más jóvenes son más propensos a criticar la guerra e impulsar condiciones para la ayuda estadounidense a su aliado de larga data.
Los resultados de la encuesta podrían tener implicaciones significativas para las próximas contiendas al Congreso en Nueva York, donde los votantes judíos representan un bloque considerable y políticamente activo. Varios distritos de la Cámara de Representantes en Brooklyn, Queens y Long Island podrían verse influenciados por el cambio de opinión, especialmente si se percibe que los demócratas están divididos o no apoyan lo suficiente a Israel.
Mientras continúa el conflicto en Medio Oriente, Trump parece beneficiarse de su fuerte mensaje a favor de Israel y contra el antisemitismo.
