Israel Kasnett

5 de noviembre de 2019

Mientras los iraníes salían a las calles esta semana para conmemorar los 40 años de la toma de posesión de la embajada de Estados Unidos en 1979, Irán anunció nuevas violaciones del acuerdo nuclear que firmó en 2015. La pícara República Islámica de Irán admitió que ahora opera 60 centrífugas IR-6 avanzadas y está trabajando en un nuevo tipo de centrífuga que funcionará 50 veces más rápido de lo que actualmente permite el acuerdo.

Este anuncio se produce después de que Irán haya participado en ataques contra petroleros e instalaciones petrolíferas saudíes, derribando un dron estadounidense y, por supuesto, sus continuos y agresivos esfuerzos por construir una máquina de guerra contra Israel en Siria y en otros lugares.

Por su parte, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció el lunes nuevas sanciones contra nueve comandantes y funcionarios militares iraníes. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se retiró del acuerdo nuclear con Irán en mayo de 2018 y reimpuso duras sanciones en un esfuerzo por frenar el comportamiento desestabilizador del régimen en Oriente Medio y en todo el mundo.

A pesar de todo, Teherán ha seguido participando en los esfuerzos de desestabilización y apoya firmemente la actividad terrorista y la acumulación de armas en el Oriente Medio.

Yaakov Amidror, ex asesor de seguridad nacional del primer ministro Benjamin Netanyahu, y actualmente analista del Instituto de Estrategia y Seguridad de Jerusalem y miembro del Instituto Judío para la Seguridad Nacional de Estados Unidos, dijo a JNS que los iraníes quieren permanecer lejos del Estado judío, pero al mismo tiempo construir “un anillo de fuego” a su alrededor. Irán apoya a Hezbolá en el Líbano y se estima que la organización terrorista tiene hasta 100.000 misiles. Irán también se esfuerza por crear una máquina de guerra independiente en Siria, que Israel ha estado trabajando para desmantelar. Según informes extranjeros y algunos israelíes, Israel ha alcanzado hasta ahora 300 objetivos en Siria.

Según Amidror, Irán se dio cuenta de que Israel ha estado teniendo éxito en Siria, por lo que comenzó a construir una rama de su maquinaria de guerra independiente en Irak, aprovechando el hecho de que los iraquíes no tienen el control total de algunas partes de su tierra. Para Irán, la idea es tener una capacidad militar cercana a Israel, mientras que ella misma permanece a distancia.

“Una pregunta interesante”, dijo Amidror, es “¿cuál debería ser la reacción de Israel en tal situación? Sabemos que la cabeza de la serpiente está en Irán. ¿Israel perseguirá objetivos en Siria, Irak, Líbano o Yemen? ¿O iremos directamente a la cabeza de la serpiente?”

Irán tiene la capacidad de atacar a Israel desde múltiples lugares, incluyendo Líbano y Siria – y ahora Irak y posiblemente Yemen -como Netanyahu mencionó recientemente.

Esto será complicado

Eytan Gilboa, profesor y director del Centro de Comunicación Internacional de la Universidad de Bar-Ilan en Ramat Gan y asociado principal de investigación del Centro de Estudios Estratégicos de BESA, dijo a JNS que recientemente han cambiado varios elementos que afectan la preparación y la toma de decisiones de Israel.

Primero, Irán atacó los campos petroleros saudíes. En segundo lugar, Estados Unidos se retiró de Siria. Y tercero, las provocaciones iraníes en el Golfo Pérsico no recibieron ninguna respuesta agresiva estadounidense.

“También vemos a la Yihad Islámica en Gaza, por orden de Irán, tratando de sabotear y socavar la situación allí”, dijo.

Al igual que Amidror, Gilboa señaló que Israel ha estado tratando de impedir que Irán construya otro frente en Siria, diciendo que “esta estrategia se ha extendido a Irak”.

Expuso la situación actual desde la perspectiva de Israel. Según Gilboa, “es obvio, por todo tipo de razones, que Irán no atacaría a Israel directamente desde su propio territorio. Irán perdió parte de la sorpresa que podría haber causado a Israel si no hubiera usado misiles de crucero contra Arabia Saudita”.

Israel está preparando respuestas adecuadas a este tipo de amenaza, ya que espera que Irán lo ataque con misiles de crucero guiados con precisión y aviones teledirigidos.

Gilboa sugirió que los componentes de la estrategia israelí deben ser primero revelar el plan de Irán. Entonces, Israel debe amenazar con tomar represalias directas y severas. Por último, Israel debe dejar claro que Siria y el Líbano pagarán el precio si los ataques contra Israel se originan en su territorio.

“Si Irán ordena a Nasrallah que ataque a Israel, esto será complicado”, dijo Gilboa. “En la Segunda Guerra del Líbano de 2006, Israel distinguió entre el ejército libanés y Hezbolá. Este ya no es el caso. Si Israel es atacado, atacará al Líbano, incluido Hezbolá. Lo mismo ocurre con Siria. Israel está tratando de persuadir (al presidente sirio) Basher Assad y a Rusia de que si Israel es atacado por Siria, es Assad quién pagará el precio”.

Además, continuó Gilboa, Israel debe informar a Rusia de la posible acción israelí después de cualquier ataque de Irán. “Estos intercambios de fuego entre Israel y los intentos iraníes de construir una base en Siria no son del todo en interés de Rusia, y por eso Rusia no está protestando contra las acciones militares israelíes en Siria”, dijo.

Israel debe trabajar para conseguir una declaración de apoyo estadounidense y debe coordinarse con Estados Unidos para anunciar que los ataques contra Israel desencadenarán la acción estadounidense.

“A primera vista”, dijo Gilboa, “estos componentes deberían crear cierto nivel de disuasión. La principal estrategia de Israel es crear disuasión o al menos limitar cualquier posible ataque iraní”.

Si Irán ataca de verdad, tendrá que haber una represalia masiva contra los intereses iraníes.

Según Gilboa, no se puede esperar que Europa se una a la lucha contra las ambiciones hegemónicas de Irán y el apoyo al terrorismo global. Son “estúpidos y sordos”, acusó, y sólo intentan apaciguar a Irán.

Tanto Amidror como Gilboa están de acuerdo en que Irán está ciertamente empeñado en que Israel esté en el punto de mira.

“La confrontación entre Irán e Israel es inevitable”, dijo Gilboa. “Hay una gran probabilidad de una acción militar iraní; esto es algo para lo que Israel se está preparando”.

“Nuestra suposición”, dijo Amidror, “no es una cuestión de si, sino de cuándo”.

Fuente: Israel Hayom. Noticias de Israel. https://israelnoticias.com/editorial/ataque-iran-israel-tiempo/