27 de mayo de 2020
Foto: El presidente Donald Trump, Jared Kushner, se reunió con el primer ministro Netanyahu en Jerusalén, el 22 de mayo de 2017.
Los líderes de las naciones árabes en el Medio Oriente advierten públicamente que la implementación de la soberanía israelí sobre las comunidades judías en Judea, Samaria y el Valle del Jordán tendrá “graves consecuencias”. Pero fuentes con conocimiento de la situación dicen que la verdad es muy diferente: “Darán luz verde al plan de paz de Trump, porque nuestros propios intereses son más importantes”, dijeron las fuentes esta semana en una entrevista con el idioma hebreo. edición de Israel Hayom.
El plan para extender la ley israelí a las comunidades israelíes en el Valle del Jordán y los principales bloques de asentamientos en Judea y Samaria, que se espera que tenga lugar en algún momento de julio, según el primer ministro Benjamin Netanyahu, ha provocado “grandes disturbios y furia” en el mundo árabe, junto con los temores de deterioro en las relaciones.
Los gobernantes de los estados árabes, particularmente Jordania, Egipto, Arabia Saudita y los estados del Golfo, advierten que la aplicación de la soberanía creará una ola de violencia e inestabilidad regional, e incluso puede poner en peligro el tratado de paz entre Israel y los jordanos.
El rey Abdullah II de Jordania también advirtió en una entrevista hace una semana con el periódico alemán Der Spiegel si Israel “realmente anexa Cisjordania en julio, provocaría un conflicto masivo con el Reino Hachemita de Jordania”.
El rey Abdullah dijo: “No quiero hacer amenazas y crear una atmósfera de necio, pero estamos considerando todas las opciones”. El Rey evitó declarar específicamente que la anexión llevaría a revocar el acuerdo de paz con Israel.
Sin embargo, altos funcionarios en estados árabes moderados dejan en claro que, a pesar de una fuerte postura pública árabe contra el plan de soberanía, hay otras voces.
Esos gobernantes se reunieron con los enviados de la administración Trump, Jared Kushner y Avi Berkowitz, en los últimos meses, los cuales continúan confiando completamente en la efectividad del ‘Acuerdo del siglo’ presentado por el presidente Donald Trump en enero pasado en Washington.
Los líderes árabes, en efecto, han dado luz verde al equipo de mapeo israelí-estadounidense para continuar promoviendo la anexión parcial a pesar de las declaraciones públicas que expresan su posición oficial en contra.
Según los informes, las naciones árabes sunitas ven la lucha contra Irán y su influencia chiíta sobre Oriente Medio como la máxima prioridad, una más importante que la cuestión de la Autoridad Palestina; no querrían arriesgar sus intereses coincidentes con los Estados Unidos e Israel por la anexión.