Foto: “Sirva helado, no odio”, escrito en una pancarta sobre la sede de Ben & Jerry’s South Burlington, Vermont, el 23 de julio de 2021
El Consejo Israelí-Estadounidense (IAC) ondeó una pancarta sobre la fábrica de Ben & Jerry’s en Burlington, Vermont y la sede mundial el viernes, en la que se leía “Sirva helado, no odio”, el hashtag de las redes sociales #BDSisHATE, junto con las banderas estadounidense e israelí.
(BDS significa boicot, desinversión y sanciones).
La medida se produce como parte de una campaña que lanzó el IAC el lunes que exige que Ben & Jerry’s detenga su boicot a parte de la población israelí.
La iniciativa es parte de un esfuerzo de promoción global que también presenta una campaña en las redes sociales que insta a los consumidores a pedir a Ben & Jerry’s y a su empresa matriz, Unilever, que no se alineen con la guerra económica de BDS contra Israel y que renueven la licencia del fabricante de helados con su fabricante israelí.
En los últimos meses, la IAC se ha convertido en una de las principales organizaciones judías estadounidenses en la movilización de la comunidad contra el antisemitismo y el antisionismo en todo Estados Unidos.
“La decisión de Ben & Jerry de dejar de vender su helado a ciertas poblaciones israelíes es una rendición vergonzosa al movimiento de odio BDS, que promueve una cultura de miedo y violencia y busca eliminar la patria judía, la única democracia en el Medio Oriente”, dijo el IAC en un comunicado.
“Unilever debería deshacerse de este acto discriminatorio y moralmente incorrecto, defender sus valores corporativos y reenfocar su marca Ben & Jerry’s en servir helado y no en odio. Instamos a Unilever a que descarte esta vergonzosa decisión, ponga fin a este boicot e invierta en cambio en la paz y la prosperidad a través del diálogo”.