(Foto AP/Jehad Alshrafi)
Las autoridades israelíes acusaron el lunes a tres terroristas de Hamas capturados en la Franja de Gaza, lo que supone los primeros cargos formales contra sospechosos palestinos del territorio desde el estallido de la guerra el 7 de octubre de 2023.
Los acusados, Mahmoud Qawasme, Ali Hamdallah y Amar Asaida, se encontraban entre los 1.027 prisioneros liberados en 2011 como parte de un acuerdo para conseguir la liberación del soldado israelí Gilad Shalit. Según un comunicado de la policía israelí, tras su deportación a Gaza, los tres hombres reanudaron su relación con Hamás y asumieron funciones de alto nivel en el “cuartel general de Cisjordania” del grupo.
La acusación formal sostiene que el trío organizó más de 120 ataques terroristas contra las fuerzas de seguridad israelíes y civiles en Yehuda y Shomron. Las pruebas recogidas incluyen cientos de testimonios que los vinculan a numerosas operaciones, dijo la policía.
Qawasme, Hamdallah y Asaida fueron detenidos durante una redada de las Fuerzas de Defensa de Israel en el Hospital Shifa de la ciudad de Gaza en marzo. El tribunal militar los ha acusado de múltiples delitos, entre ellos pertenencia a una organización terrorista, causar muertes, secuestros, financiación del terrorismo y tráfico de armas.
El comandante jefe del distrito de Yehuda y Shomron de la policía israelí, Moshe Pinchi, calificó las acusaciones como un hito en la investigación en curso sobre los ataques del 7 de octubre.
“Por primera vez desde el comienzo de la guerra, hoy se presentaron acusaciones en un tribunal israelí contra terroristas de Hamás por su intención de llevar a cabo ataques terroristas”, dijo Pinchi. “Esto representa un logro significativo en la impartición de justicia para las víctimas de estos actos atroces”.
Durante la invasión inicial del 7 de octubre, aproximadamente 6.000 terroristas de Hamás, la Yihad Islámica y otros grupos violaron las fronteras israelíes. Las fuerzas de seguridad israelíes mataron a unos 1.000 de los atacantes y capturaron a cientos.
En respuesta a este ataque sin precedentes, los legisladores israelíes han propuesto la creación de un tribunal especial para investigar y procesar a los implicados en las atrocidades del 7 de octubre. Según informes, la fiscal general israelí Gali Baharav-Miara y otras autoridades jurídicas creen que el sistema judicial actual es inadecuado para manejar la escala y la complejidad de estos casos.
El tribunal propuesto tendría como objetivo exponer la ideología, la financiación y las operaciones detrás de Hamás, y presentar sus conclusiones a la comunidad internacional.
