27 de noviembre de 2019
Una asociación de más de 1.000 rabinos ortodoxos estadounidenses ha criticado enérgicamente una carta enviada por un grupo de 107 miembros demócratas de la Cámara de Representantes de Estados Unidos que se oponen a la nueva política de la administración Trump sobre los poblados israelíes.
A principios de este mes, el Secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, anunció que el gobierno de Estados Unidos ya no considera que los poblados israelíes sean ilegales, una decisión que fue muy bien recibida en Israel, pero que fue criticada por otros como un paso que alentaría la construcción de más poblados y la aplicación de la soberanía israelí, lo que podría perjudicar aún más las posibilidades de alcanzar un acuerdo de paz basado en la solución de dos Estados.
En la carta escrita por los congresistas demócratas a Pompeo, afirmaron que “la expansión de los poblados en Judea y Samaria ocupada hace inviable un Estado palestino contiguo”; dijeron que tal medida ponía en peligro “el futuro de Israel como patria segura y democrática para el pueblo judío”; constituyeron “un apoyo tácito a los poblados, su expansión y las demoliciones asociadas a ellos de viviendas palestinas”; y dijeron que “hacen caso omiso del Cuarto Convenio de Ginebra, que prohíbe a las potencias ocupantes la deportación o el traslado de su población civil hacia el territorio que ocupan”.
La Coalición por los Valores Judíos (CVJ) se opuso fuertemente a los argumentos presentados por los demócratas y rechazó las afirmaciones hechas en su carta a Pompeo.
Los rabinos de la CVJ dijeron que la carta “describe incorrectamente el área de Judea y Samaria como ‘ocupada’”, argumentando en cambio que fue “cedida voluntariamente por el Reino Unido y confiscada ilegalmente por Jordania en 1948”, y que por extensión no se aplica el Cuarto Convenio de Ginebra.
CVJ también insistió en que la Resolución 242 de la ONU requería que Israel se retirara sólo de una parte de los territorios que Israel capturó en 1967 y sólo en el contexto de un acuerdo de paz duradero, señalando que esto aún no ha ocurrido.
“En Judea y Samaria hay mucho espacio para que la gente resida en paz, la completamente nueva ciudad árabe de Rawabi alberga a más de 4.000 personas, y todavía está en construcción con el apoyo activo de Israel”, continuaron los rabinos.
“Es lamentable que haya firmado una carta que socava al aliado más firme de Estados Unidos, un país que siempre ha buscado la paz”, dijeron a los congresistas demócratas.
“Debemos pedir que su carta sea retirada en su forma actual, ya que podría perjudicar gravemente la seguridad y la soberanía de Israel, y perjudicar en lugar de aumentar la probabilidad de establecer una paz justa y duradera”.