23 de febrero de 2020
En respuesta al pánico por el coronavirus, las FDI anunciaron el domingo que se estaba preparando para poner en cuarentena a unos 200 turistas surcoreanos en una base militar en Har Gilo. Esto se hizo sin informar a la población civil, sin importar consultarlo.
Los residentes de Gush Etzion protestaron el domingo por el movimiento de las FDI y bloquearon las carreteras locales. También enviaron una carta urgente al ministro de Defensa, Naftali Bennett, diciendo: “Cancele la peligrosa decisión de inmediato. A medida que se propague la pandemia, usted será responsable de poner en peligro la vida de los residentes del área de Jerusalem”.
El jefe del Consejo Regional de Gush Etzion, Shlomo Ne’eman, respondió a la decisión unilateral diciendo:
“Por casualidad descubrimos la intención de las FDI de crear una instalación de aislamiento médico en el corazón de una comunidad civil. Esto es completamente inaceptable. Incluso si es necesario el tratamiento del virus, la decisión no se puede tomar a espaldas de los funcionarios locales. El complejo de Kiryah en Tel Aviv también es una instalación militar, entonces, ¿por qué no establecer un sitio de cuarentena allí?
“Exigimos que los responsables rescindan esta decisión de inmediato e inicien un diálogo con nuestras autoridades locales según lo exija el protocolo. No somos el ‘patio trasero’ de nadie y no podremos operar dentro de nuestras comunidades si nuestro consejo local no tiene la autoridad para tomar decisiones”.
(YWN)
